Estrellas callejeras de Milán
MILÁN (Italia), 23 de septiembre 2014 - La "Fashion Week" de Milán es uno de los grandes eventos de la moda mundial, pero para los fotógrafos que la cubren es, más que eso, una prueba de fuego. Los desfiles se hacen en los cuatro puntos cardinales de la ciudad, así que para llegar de uno a otro hay que salir con mucha anticipación y sortear el tráfico y batallar con la conducción a la italiana...
Este año aproveché que éramos más que de costumbre –cuatro fotógrafos en lugar de tres– para intentar captar y mostrar una mirada diferente del evento. Esta vez dejé de lado los desfiles y me dediqué a los entretelones y a todo lo que pasaba en la calle. Y descubrí un mundo del que no tenía ni idea.
Los grandes desfiles de moda son un poco como las alfombras rojas de Hollywood: las estrellas se hacen esperar, llegan a último momento. Todo lo contrario que la mayoría desconocida, que llega muy temprano para tratar de llamar la atención y ser fotografiada.
Se trata de simples invitados que aparecen con sus ropas de marca o vestidos de forma absolutamente excéntrica, representantes de pequeñas casas de moda que tratan de hacerse un lugar bajo el sol, aspirantes a modelos -con o sin las condiciones para serlo... Un microcosmos efervescente, diferente por completo al otro, mucho más encopetado, se encuentra al margen de las pasarelas. Personas que se conocen y se saludan y conversan y, por supuesto, están encantadas de que un fotógrafo se interese por ellas.
En la multitud que gravita en torno a los desfiles de moda, se encuentra también una gran cantidad de blogueras y blogueros. El mundo de la moda cada vez más de los blogs. Estos críticos de la moda aficionados o semi profesionales, la mayoría de los cuales viene de Europa del Este, funcionan a la par de los medios tradicionales y, a veces, los sustituyen. Su aprobación y consejos pueden tener un gran peso en los círculos de la moda, al punto de que algunos blogs son valorados en millones de dólares.
La bloguera de moda Chiara Ferragni antes... (AFP/Gabriel Bouys)
Uno de los blogs más influyentes es el de Chiara Ferragni. Ella tiene una estrategia de estrella. Por ejemplo, llegó al desfile de Cavalli una media hora después de comenzado, causando una pequeña aglomeración a su alrededor al pie del Arco della Pace, el arco de triunfo de Milán en la plaza Sempione. Todos los demás blogueros se apresuraron a sacarle fotos vistiendo su segundo outfit de la mañana (un par de horas antes, llevaba una ropa diferente para el desfile de Armani...)
... y después (AFP/Gabriel Bouys)
Entre las "modelos" que fotografié en la calle estaban las que hacían como que hablaban por teléfono y las que corrían como si estuvieran retrasadas para el desfile. Pero todas, una vez pasado ese momento de "hacer como que", posan mucho más voluntariamente, luego de encogerse de hombros con una sonrisa mientras las puertas se cierran y se hace evidente que no estaban en la lista de invitados. Todo esto es un poco trivial, pero aun así es divertido y, sobre todo, es una buena excusa para publicar algunas fotos en mi cuenta de Instagram.
Y, finalmente, están los simples fans de la moda, que no están invitados a ningún desfile ni pretenden estarlo, pero que merodean la entrada para ver qué pasa. Son el equivalente de los aficionados al fútbol que no han encontrado un lugar en las gradas, pero se congregan en la entrada del estadio con sus banderas y camisetas para apoyar a su equipo.
Gabriel Bouys es fotógrafo de AFP en Roma. Más de sus fotos en su cuenta Instagram.
Selfie antes del desfile de Gucci el 17 de septiembre (AFP/Grabiel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
La bloguera de moda Linda Tol el 21 de septiembre de 2014 (AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)
(AFP/Gabriel Bouys)