"Cuando se describe una crisis alimentaria es fácil limitarse al sufrimiento de los niños que padecen malnutrición. Esos a los que vemos con las costillas sobresaliendo de su pecho como consecuencia del hambre", escribe Albert Gonzalez Farran, fotógrafo basado en Juba. " Ellos son parte de la historia y, sin duda, la parte que provoca las reacciones más fuertes".
"Pero hay muchas otras cosas que no pueden caer en el olvido: la gente que espera comida, la gente que recoge hojas de los árboles para comérselas, los que ingieren las cañas de azúcar tal cual, a falta de otra cosa. El reto del trabajo del fotógrafo es capturar estos momentos para ilustrar la extensión del drama".